Valeriano Gómez, en su último día en el cargo, adjudicó 152 millones en subvenciones

El Ministerio de Trabajo e Inmigración saliente, encabezado por Valeriano Gómez, aprovechó las últimas horas en el cargo para, la víspera de que se constituyera el nuevo Congreso con la mayoría absoluta del PP, entregar más de 152 millones de euros en subvenciones del Servicio Público de Empleo Estatal (Sepes) para fomento y promoción del empleo. Los grandes beneficiados, la Diputación de Cádiz (por la que Alfredo Pérez Rubalcaba fue candidato en 2008 y este año acudía Manuel Chaves), CC.OO. y UGT.

La resolución del 12 de diciembre ha aparecido publicada hoy en el BOE, apenas 48 horas después de que se hicieran públicos los 63 millones en subvenciones que el Ministerio de Exteriores en funciones concedió el 21 de noviembre, un día después de perder las elecciones. Trabajo apuró aún más y las concedió en las últimas horas del plazo que le permite la ley y cuando, unas horas después, sus titulares debían abandonar sus despachos.

Beneficiados de la lluvia de millones han sido decenas de pueblos de Extremadura y Andalucía para “fomento del empleo agrario”, como los 234.000 euros para el ayuntamiento de Ceclavín o los 302.000 para Huercal Overa, pero la palma se la lleva la Diputación de Cádiz, con un total de 76 subvenciones por un importe total de 13.298.443 euros. Un dinero que, a la vista de la evolución del paro en la provincia, no parece que haya dado muchos frutos. La diputación provincial de Córdoba, por ejemplo, logra ‘sólo’ 778.000,88 euros en el reparto.

Como viene siendo habitual en estas subvenciones, los sindicatos también salen muy beneficiados. Bajo el concepto “Ayudas del subsistema de formación profesional para el empleo: formación profesional de ocupados”, CC.OO. recibe varias partidas: la Confederación Sindical de CC.OO., 7.480.141,26; FECOMA-CC.OO., otros 111.375; tres partidas de 230.046,88 euros, 41.820 y 660.142,94 para la Federación de la Industria Textil-Piel, Químicas y Afines del mismo sindicato; otras dos partidas de 106.831,08 y 151.360 para la Federación de Industria de CC.OO.; otros 181.900 y 180.046,96 para la Federación de Servicios a la Ciudadanía del sindicato; el reparto termina con dos partidas más para la Confederación Sindical de CC.OO, por 316.000 euros. En total, CC.OO. recibe casi 9’5 millones de euros.

Para la UGT tampoco ha ido mal el reparto ‘in extremis’ del anterior Gobierno. La Federación de Industrias Afines de UGT se lleva seis partidas por un importe total de 1.188.370 euros; FTCM-UGT otros 175.171; Metal Construcción y Afines UGT, 191.166; otros 112.000 para UGT Melilla y 111.306 más para la de Ceuta; y el grueso, 7.600.053,65 euros directamente a Unión General de Trabajadores de España. En total, el sindicato afín al PSOE se embolsa directamente 9’3 millones.

A estas cifras hay que sumar los 30 millones (30.025.756,10 euros) que recibe la Fundación Metal Formación Cualificación y Empleo, una entidad dedicada a dar cursos de formación con sede en Gijón y que está participada por los dos sindicatos y la Federación de Empresarios del Metal de Asturias. Los empresarios, por cierto, tampoco salen mal parados: la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa se ve recompensada con 6.669.491 euros y la CEOE con otros 6.598.549 euros.